Antología del Taller "Al Pie de la letra"

Prólogo

A nuestro alrededor abundan los signos de nuestro origen, se cuelan las letras. Hasta las bocas llegan las sílabas. Son apenas una vibración, suenan débiles; diferentes voces nacen o se reconstruyen. Pero al modo de la piedra que cae al agua, la palabra adquiere cada vez más fuerza y resuena ya no débil. Ahonda en imágenes sensoriales, va manifestando su lenguaje interior.

En la pasividad que provocan los tiempos inciertos, quince autores artesanos de las palabras se pusieron de pie: al pie de la letra . Abrieron ventanas que miran, dejan entrar, para respirar e iluminarse. Les dieron cuerpo a las letras que urgen en tiempos difíciles.

Territorio que aborda diferentes tópicos literarios donde nos esperan personajes conmovedores e inquietantes. Las peripecias con /contra la naturaleza, los días y las sombras, la secreta existencia.

Historias donde se reflejan íntimos temores y deseos que alimentan nuestras tragedias y felicidades cotidianas. Y los poemas en palabras breves; otras, extendidas. Anhelos de expresar aquello que nos duele o nos asombra. Inspiración profunda frente a la vida y muerte reveladas. 

El taller Al Pie de la Letra cumplió nueve años. En el trayecto han transcurrido seres maravillosos que dejaron su huella. Hoy, ante la imposibilidad de las reuniones presenciales, se abrieron paso nuevos formatos y, con ellos, oportunidades que antes no habíamos imaginado. La nueva modalidad permitió que se incorporaran  personas provenientes de diferentes lugares. Navegamos en otras aguas, develamos mundos impensados, abrimos nuevos modos de ver a través de las variadas lecturas y continuamos con el espíritu de conocer nuevos autores. La lectura, nos dice Barthes, es buena conductora del Deseo de escribir. Hay deleite cuando nos perdemos, en un cuento, en una novela, en un poema. Del diálogo entre libros y escritores surge la creación e incluso el valor de la reescritura, el trabajo con su herramienta: la palabra.

Celebramos los logros literarios. Quienes han llevado adelante un taller saben de la importancia de los vínculos.

Apreciamos que lo escrito circule, abra caminos, que no permanezca en un solo lugar, a fin de que se conozcan las innumerables variaciones y voces. El decir, en el paso a paso creador en continua metamorfosis. Se expande lo emotivo, lo imaginario y lo lúdico.

Lectores: les doy la bienvenida a este libro que quince autores supieron crear. Los invito a leerlos pausadamente, paladeando matices y diferencias.  

Marcela Galván

Coordinadora